Hace un tiempo me consideraba fuerte; no fisicamente, emocionalmente. Sabía cuando había que reir, cuando había que parar y cuando había que llorar, aunque me costaba largar lágrimas, y más por alguien que sea mi pareja.
Todos los días noto un poco más como mi persona cambia y lentamente, con el tiempo me vuelvo un poco más frágil, débil y suceptible.
Mi cabeza era como una pelota de futbol con un buen aire, pero en este tiempo se desinfló y no la podés patear porque sabés que si sos bruto, se rompe.
Soy muy felíz con mi vida, con mi familia y amigos, pero de a poco me voy descubriendo a mi misma, lo que me importa de verdad, y lo que quiero para el resto de mis años.
Estar de novia me arregló mucho "el corazón", pero es como el shin y shan (creo que se escribe así), todo lo bueno siempre tiene algo malo, y lo malo algo bueno; a lo que voy, enamorarse es perfecto y lindo, si es correspondido obvio, pero a veces es dificil manejarlo, para que no se te vaya de las manos con tantas emociones juntas que te hace sentir el verdadero amor.
Tengo que dejar de pensar tanto y vivir más.
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