Tener personalidad fuerte es un don a veces, como otras no lo es. Cuando uno se impone demasiado a si mismo se complican las cosas, no es aceptado por algunas personas, por otras quizás es hasta admirado pero lleva a medios extremos.
No pienso que la gente más tranquila, que se banca todo más, que es más relajada, menos peleadora y esas cosas sea peor, al contrario, se lleva mucho más!. Nunca nadie le tira mala onda, siempre vive positivo porque no le enojan las bobadas que enojan a otros y así.
Me doy cuenta de algunas de estas cosas muchas veces en algunas situaciones a través de mi relación con mi novio.
El es un geminiano, muy tranquilo, relajado, solo quiere pasarla bien y listo. En cambio, yo, acuariana, encuentro siempre algo en qué enojarme; soy intolerante, soy impaciente, y creo en los momentos -perfectos- pero no creo que yo pueda dejarlos así y nada más. Es irónico, porque detesto ese estado mio y analizo demasiado todo, cuando debería estar viviendo y dejar de darle importancia.
Obviamente es atrayente todo eso que porto encima; cuando algo apenas me molesta, cambio de humor y algo más de eso malo atraje y listo, fuí complicando las cosas; me llama la atención, porque para mi esas cosas que me pusieron del peor humor, para mucha gente en realidad, son bobadas!.. como perder un colectivo es lo peor que puede pasarme, que se me tilde la computadora, que me desarmen la cama y algunas otras manías y cosas mínimas, pero que llegan a afectarme para cambiarme el ánimo.
Ahora estoy bastante enojada, de ahí surgió mi bronca y estos pensamientos... me dí cuenta que un conocido que agregué al facebook me ignoró y me sentí idiota, obviamente a esa persona lo declaré inexistente ahora (jajaja) y Matias simplemente me dijo algo como: ya fue, ni bola.
Lo malo es que reconozco que son idioteces, pero intentó hacer esfuerzos por sacar esa histeria, esa histeria o mala onda que siento por cosas insignificantes que me hacen desperdiciar buenos momentos a veces, y podría tomarmelos.. con soda digamos!
Bueno, soy una caprichosa, es la verdad... por suerte encontré alguien que me tolere tal cual soy.
